[hle] sentimientos encontrados

La máquina para programar los sentimientos tendría que tener agua. Podría ser el lavabo del baño. Entrar en contacto con la piel para después decidir cada uno de los estados de ánimo. Una fenomenología de los afectos, para decirlo con Heidegger, pero controlada por una máquina que nos puede tranquilizar o alterar.

Programa de afectos para un sábado lluvioso en la ciudad de México.

Dormir 8 horas sin tener pesadumbre. Descansar por completo el cuerpo, los hombros, los muslos de la cara, la mandíbula.

Despertar boca arriba.

Los primeros quince minutos solo sentir un poco de tristeza por la ausencia de mi padre durante mi infancia. Desayunar sintiendo el vacío de que nunca me preparó el lunch para ir a la primaria.

Seguido de 45 minutos de armonía, aunque fue triste su ausencia tener 45 minutos de buen humor, de que casi cualquier cosa me lleve a reír, asomarme por la ventana y sentir que todo está en su justo momento, sentir sobre todo que “todo pasa por algo y los movimientos son buenos cambios”.

Una hora de esperanza en el futuro. Con grandes recordatorios de libros de historia en donde hasta en el profundo Congo hubo bienestar en el siglo XIX. Sentir que la historiografía tiene sentido. Sonreír porque hay esperanza.

10 minutos de incredulidad ante el mundo, pero sobre todo ante lo que soy.

30 minutos de sentir bienestar auditivo, como cuando se escuchan 3 canciones viejas de las que hacía mucho tiempo no las recordaba pero además no las escuchaba, es un placer tenerlas nuevamente en el radar.

1 hora de concentración en cualquier tarea que se haga.

3 horas de querer terminar un proyecto personal, abrir el programa y escribir, terminar de formar el libro, releerlo, enviar mails a los autores, programar citas.

Media hora de querer inventar una receta de cocina con los ingredientes que se encuentren en el refrigerador. Sin pensarlo mucho, colocar ajo, cebolla y algún ingrediente sorpresa.

15 minutos creyendo que todo puede salir bien porque es sábado.

1 hora ideando una fiesta de cumpleaños a finales de noviembre, es temática y el ganador del concurso tendrá como regalo libros de todo el catálogo de la editorial. Me da tiempo de hacer el flyer.

1 hora de ánimo para hacer ejercicio en casa, bajar una aplicación y colocar los datos personales tal como los solicité la app.

7 minutos para llorar fuerte. Sin ningún motivo aparente solo llorar bien recio.

Dormir 2 horas seguidas después del llanto.

Despertar con unas ganas inauditas de comer helado.

2 horas de concentración para escribir una historia de ficción en donde la protagonista solo habla de sus recuerdos con personas con las que ha compartido un helado. Cada capítulo tiene como título el sabor del helado.

1 hora para hablar por teléfono con mi mejor amiga mientras tomo una malteada de pistache.

20 minutos de sentir mucho sueño.

Ir a la cama.