[hle] trayecto

Idalia Sautto
2 min readApr 18, 2020

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Kiki y señor Panthro durante taller de Hasta la Entraña

Me arreglé el cabello de una forma extravagante porque sabía que no saldría de casa. Es la primera vez que hago esto y siento que lo seguiré haciendo hasta que agote los peinados. La primera junta fue a las 12 del día y mi jefe notó que había hecho algo distinto con mi cabello.

—¿Te lo has pintado?

—No, ya lo tenía pintado desde antes.

Quisiera ser diferente aunque parezca que las cosas no cambian. En mi whatsapp encontré un mensaje en donde me solicitaban una recomendación literaria. Fue muy difícil elegir un libro. Y decidí recomendar un poeta al que recurría siempre que encontraba un bache en el camino. Se llama Pedro Casariego Córdoba.

Voy a copiar un fragmento al azar:

Markowitz encendió la luz y la oscuridad se durmió. Discutíamos en voz baja y pensé que la araña más grande semejaba una fortaleza más bien pequeña. Pronto descubrimos que las supuestas arañas no eran sino manchas mecánicas de tinta china y Nadezhda atrapó uno de aquellos ingenios con la seda de su pañuelo.

De este autor siempre me gustó su elemento sorpresa basado en el absurdo. En esta misma historia aparece un dragón de 3 cabezas, las arañas escriben adjetivos en las paredes y el brillo de las uñas en el protagonista es tan luminoso que genera la envidia del mesero.

Volver a las letras de Casariego me ubicaron en un lugar del pasado pero también de este presente. En donde por primera vez puedo reconocer el asombro. Creo que cuando lo leí por primera vez no podía analizar lo que ahora sí. No tenía la capacidad de examinar su escritura como ahora, entonces hoy, cuando volví a abrir el libro, pude voltearlo, como se voltea la funda de una almohada y se encuentran las pelusas y las cosas que se guardan entre las costuras.

Y fue muy fuerte lo que me ocurrió porque fue otra vez el elemento sorpresa, me gustó más que antes. ¿En qué radica que un texto envejezca o se mantenga fresco?

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